Hoy nos acercamos a la Avenida de Dilar, para adentrarnos en el particular jardín que nos ofrecen D. Manuel Vedía y Dña. Pilar Martín en su Floristería Verdegal. Ellos son los encargados de realizar los maravillosos exornos florales de los que disfrutamos en varios de nuestros pasos por las calles de Granada, así como de engalanar y engrandecer diferentes actos y cultos de nuestras Hermandades. Gracias a sus manos, al Santísimo Cristo de la Expiración y a María Santísima del Mayor Dolor no le faltado un detalle en su ornamentación floral en los últimos años, cosa que desde este blog quisiera agradecerles públicamente. Agradeciéndoles de antemano el tiempo que les robo de su trabajo, vamos a conocer un poco más acerca de su trabajo:
¿Cómo comenzasteis y cuánto tiempo lleváis
en el mundo de la floristería en general?
Llevamos con nuestra floristería cerca de
30 años (exactamente desde el 25-04-1985) y los inicios fueron de lo más
rocambolescos puesto que nuestra experiencia en el mundo de la flor se limitaba
a colaboraciones puntuales de Pilar, durante su época de estudiante, en la
floristería de su tío Pepe Roldán.
Y si afinamos un poco más, y hablamos del
mundo cofrade en particular, ¿cómo y cuando surgió esa posibilidad de
contribuir de esta forma tan bella con nuestras Hermandades?
En nuestro caso hay que decir que fuimos
cocineros antes que frailes. Nuestros inicios cofrades se remontan a 1981, año en que comencé de costalero con la
Virgen de la Victoria, mientras que la floristería abrió sus puertas en 1985.
Por aquellos años ya estábamos muy vinculados a la hermandad y yo pertenecía a
la Junta Directiva del Cuerpo de Costaleros por lo que muy pronto en 1987
realizamos el exorno floral del primer altar de cultos; concretamente para la Virgen
de la Victoria, como no podía ser de otra manera. A partir de entonces han sido
innumerables los trabajos que hemos realizado para diferentes hermandades de
Granada y localidades del cinturón.
Sé que tenéis un fuerte y arraigado
sentimiento cofrade y un gran compromiso con nuestra Semana Mayor, ya que
aparte de pertenecer a Hermandades, también otorgáis el “Premio Espinosa
Cuadros”, entre otras muchas colaboraciones. ¿Esto hace que a la hora de
trabajar se realice de forma diferente?

¿Pensáis realmente que el resultado final
no puede ser el mismo entre un florista cofrade que uno que no lo sea? El
“pellizco” tiene que notarse…
Suponemos que habrá un poco de todo.
Habrá floristas que aun no siendo cofrades realizan trabajos notables y
viceversa. No obstante creemos que más que en el resultado final de un trabajo
es durante la realización del mismo en lo que si debe haber diferencias. No es
lo mismo hacer un trabajo que te gusta que hacerlo por obligación. A nosotros nos gusta y disfrutamos mucho con el
exorno de un altar y todavía más con un paso ya sea palio o misterio. Es un
trabajo que a pesar del cansancio y la tensión que puedas acumular es muy reconfortable;
no hay palabras para describir con exactitud las emociones, sentimientos y
vivencias que se experimentan durante el exorno de un paso, que entendemos que
un florista que no sea cofrade seguramente no percibirá. Estar tan cerca de
esas sagradas imágenes y en silencio mirarle a los ojos, acariciarlas y
besarlas mientras se coloca la flor es un privilegio al alcance de muy pocos y
para nosotros un orgullo muy grande.
A día de hoy, ¿cuántas Hermandades han
tenido el placer de contar con vuestro arte floral?. ¿Cuántas lo disfrutan
actualmente?
Ya sea para exorno de altares, como de
los pasos, hemos trabajado o estamos trabajando para las siguientes
hermandades: Cena, Maravillas,
Despojado, Rescate, Huerto, Dolores, Viacrucis, Esperanza, Caridad, Penas,
Nazareno, Escolapios y Resucitado de Regina. Aparte puntualmente hemos
realizado algún altar, traslado o viacrucis para la Hdad. del Trabajo, Rosario,
Redención, Estudiantes, Aurora, Gitanos y creo que no se nos ha pasado ninguna. También hacemos el exorno floral de la
Archicofradía del Rosario y durante unos años realizamos el de la Archicofradía
de Maria Auxiliadora de la Alhambra, la Asociación Maria Auxiliadora del Zaidín
y Corpus del Zaidín, con independencia de diferentes altares de culto y
viacrucis de hermandades de pueblos del cinturón de Granada, como Belicena,
Albuñuelas, Güejar Sierra y alguno mas.
Imagino que habrá cambiado mucho la forma
de engalanar nuestros pasos desde aquel entonces, ¿verdad?. ¿Cómo veis en
general el nivel floral de nuestras Hermandades?.
Desde principios de los años 90 en que
comenzamos a exornar pasos, la cosa ha
cambiado bastante; las grandes esquineras han pasado a ser mucho más recortadas, los frisos mucho más
estilizados (cuando no sustituidos por pequeños ramitos entre varal) y las
jarras han perdido la exuberancia de antaño. En su conjunto el exorno de los
pasos es mucho más recatado y ha ganado en elegancia. Creemos que Granada no
tiene mucho que envidiar, en cuanto a nivel del exorno floral se refiere, a
otras semanas santas del entorno, aunque cada una con su estilo propio.
Antirrhinum, dendrobiun, “margarita spider”…
Yo de pequeño sólo sabía de claveles, rosas y lirios. ¿Por qué ese cambio de lo clásico?
Efectivamente el clavel, iris y rosa, junto
con el gladiolo, han sido las flores más frecuentemente utilizadas durante décadas,
aunque no siempre ha sido así y si nos remontamos a los años 40 vemos como se
utilizaban mucho las margaritas, la flor de pato y otras variedades silvestres
que en muchas ocasiones procedían de las propias huertas y jardines de los
hermanos (se utilizaba todo lo que se podía, incluso flor de papel, dadas las
carencias económicas). En los últimos años, la globalización también ha llegado
al mercado de la flor. Hoy en día en 48 horas se puede disponer de flor de casi
cualquier parte del mundo, vía Holanda. Esto ha originado que variedades de
flor que antes eran poco conocidas aquí ya sean frecuentes en las floristerías
y lógicamente al haber mayor oferta hay más posibilidades de cambiar, dentro de
ese ánimo innovador de muchos cofrades.
¿Creéis que aún se puede experimentar más en
los exornos, o nuestro diccionario floral ya no debería de engrosar?
Casi a diario siguen apareciendo en el
mercado nuevas variedades de flor, y a buen seguro que en los próximos años
conoceremos otros tipos de flor que ahora no se comercializan y esto puede ser
bueno porque siempre se nos presentan nuevas posibilidades de combinación de
flor en un momento dado. Pero esto no
quiere decir que necesariamente haya que cambiar por cambiar; entendemos que todo cambio debe ser fruto de
una evolución más o menos progresiva, nunca de una revolución innovadora.
Y hablando de experimentar, personalmente
creo que en algunos casos se ven auténticas barbaridades, tanto en cultos como
en pasos. ¿Dónde está el límite a la hora de “inventar”?
Nosotros nos consideramos bastante
conservadores en este sentido y nos gusta lo clásico, pero no por ello nos
cerramos a lo nuevo y a esa evolución a la que hacíamos mención anteriormente,
pero todo dentro de una lógica y unos criterios razonables, hay que tener en
cuenta lo que se está haciendo y el entorno donde se está haciendo. Los
experimentos siempre se ha dicho que con gaseosa. No es lo mismo el exorno
floral de una boda civil en un espacio abierto que en uno cerrado, ni tampoco
el exorno de una boda en un templo del siglo XVII o XVIII que en uno de estilo
futurista; y podíamos seguir poniendo muchos ejemplos. Lo mismo se puede aplicar
al exorno de los pasos de Semana Santa que debería ser acorde con el tipo y
características de la hermandad y con esto no queremos decir que todos tengan
que ir de clavel o de rosas, pero si mantenerse dentro de unos cánones no
escritos de elegancia, clasicismo y
sobriedad, que no están reñidos entre sí, y aunque y no pretendemos
hacer una crítica a ningún florista o hermandad, pensamos que se deberían
evitar en lo posible algunos excesos fruto de un desmedido afán innovador que
muchas veces no tiene mucho sentido. Distinto puede ser en salidas
extraordinarias y altares de culto inmaculistas, conmemorativos u otras
festividades litúrgicas , que si son más
propicios para introducir otras alternativas y variantes novedosas.
Todo esto es una opinión muy personal que no
tiene por qué ser compartida, y realizada desde el máximo respeto a todo y a
todos, pero pensamos que esta fiebre innovadora y de importación de estilos de
otras ciudades pasará en unos años, creemos
que, como todo en esta vida, es solo cuestión de tiempo y un poco de más madurez y formación cofrade, que gracias a Dios vamos adquiriéndola todos poco a poco. En este mundo se aprende algo todos los días.
Algunas Hermandades, simplemente con
nombrarlas, ya sabes como se va a presentar de flor cada año. ¿Se pierde esa
incertidumbre que nos gusta a las cofrades por ver algo nuevo, o por el
contrario se gana en tradición?
Quizás la virtud esté en conseguir ambas
cosas, que no tienen por qué ser incompatibles. No solo el tipo de flor que se
emplee puede marcar el estilo de una hermandad, sino también la colocación de
la misma. Se podría mantener el clavel año tras año y que en cambio el exorno
floral no se pareciera en nada al del año anterior y por el contrario podríamos
cambiar de flor pero mantener parecida fisonomía; depende mucho de la forma en
que se trabaje la flor, aunque no es menos cierto que determinadas variedades
de flor no ofrecen la posibilidad de mantener esa misma fisonomía a la que
antes aludíamos.
A la hora de decidir la flor, imagino que
las Hermandades deberían de venir con una idea en la cabeza acorde a su estilo
y tradición, ¿no es así?
Efectivamente, las hermandades a las que
les trabajamos, en la mayoría de los casos ya traen una idea clara de lo que
quieren, que generalmente se ajusta a su
estilo de los últimos años con pequeñísimas variaciones, y en algunos casos
ninguna (excepción hecha de la Magna Mariana que sí entendíamos que era una
fecha proclive a presentar novedades).
Cuando una hermandad pretende hacer un
modificación sustancial del exorno floral de algún paso, como este año
concretamente ocurrió con la hermandad de las Penas, pues en ese caso entre la
hermandad y nosotros analizamos diferentes posibilidades, hicimos alguna prueba
y finalmente el resultado se pudo ver en la calle; el nuevo exorno floral a
base de rosa blancas y freessia del mismo color creemos que fue muy acertado,
buscando una línea de elegancia que al parecer
fue muy del agrado de los
cofrades.
¿Se han dado casos en que vinieran con una
idea y, aconsejados por vosotros, se hayan replanteado su exorno?
En algún caso sí, pero más por cuestiones
de imposibilidad material o económica. Esta circunstancia se suele dar mas en
altares de cultos que en la salida. Hay veces que el prioste trae una idea y en
esa fecha concreta no se puede conseguir una determinada flor o resulta muy
cara, entonces se trata de buscar soluciones alternativas. También no cabe duda
que cuando a un prioste le adviertes ciertos inconvenientes de alguna variedad
de flor, como su duración o fragilidad o cualquier otro, rápidamente cambia de
parecer.
¿Cuál es la variedad de flor que más os
encargan? ¿Y la más atípica?
En los últimos años el clavel, rosas, e iris
son las mas demandadas, seguidas de freesias y lisiantus. Como variedades mas
extrañas algunos tipos de verdes como la molucela, virmundo, miroclaudio o flor de hortensia.
¿Hay algún tipo de flor que no se use
actualmente y que vosotros pensáis que podría dar mucho juego cofrade?
En la actualidad está todo bastante
trillado y si alguna variedad de flor no se utiliza es porque prácticamente no
tiene cabida.
¿Cuál es el protocolo a seguir desde que se
encarga la flor hasta que la disfrutamos en la calle?
Contactamos con diferentes proveedores
para ver precios y calidades; resuelto este tema y una vez se recibe la flor
hay que proceder a hidratarla a base de agua con algún producto conservante.
Luego en función del grado de apertura que presenta tenemos que jugar con la
cámara frigorífica si necesitamos que se mantenga o por el contrario darle
calor si lo que precisamos es adelantar su apertura.
Me consta que tiene muchas horas de trabajo
cualquier exorno, ¿compensa realmente?
Te podemos decir que desde el punto de
vista estrictamente económico, si valoras las horas que le dedicas a todo eso,
las preocupaciones que de todo ello se derivan y la responsabilidad tan grande que
se contrae con una hermandad cuando de exornar un paso se refiere, la verdad es
que no compensaría (aunque no cabe duda que se gana un dinerillo), pero hay
otros factores tales como orgullo personal, superación profesional e incluso
devocionales…. que nos compensan por todo.
Cada cual que sea consciente de lo que hace y valore su trabajo de la manera que crea conveniente.
Imagino que la crisis se ha dejado notar
bastante a la hora de adornar nuestros pasos. ¿No llegaremos a verlos con
flores de tela, no?
Ciertamente se ha notado bastante, si
bien más en los altares de culto que en la salida, cuando las hermandades echan
el resto. No obstante seguro que no llega la sangre al rio, siempre habrá
hermanos que con esfuerzo ayudarán para que la flor de tela no vuelva a un paso
de semana santa.
Por último, y dado que se trata de un blog
de la Hermandad Escolapia, ¿qué opinión
tenéis de la misma en general? ¿Y a nivel floral?
tenéis de la misma en general? ¿Y a nivel floral?
De los Escolapios al igual que del resto
de hermandades a las que les trabajamos o hemos trabajado no podemos tener mas
que palabras de agradecimiento. Desde el primer momento nos acogieron con mucho
cariño y respeto; de verdad es un gustazo exornar los pasos cada Jueves Santo,
allí en la intimidad, rodeados de tanta buena gente dispuesta a ayudar. De
verdad, de verdad que no es un cumplido y por si fuera poco, esa maravilla de
titulares que no sabes a quien mirar, si al Santísimo Cristo de la Expiración o
a su bendita Madre…. Un privilegio de cada mañana de Jueves Santo.
A nivel floral hay que decir que a pesar de
lo variado, que para alguien pudiera resultar su exorno floral, entendemos que
su ejecución y conjugación de colores es muy apropiada y ha establecido un
estilo propio y característico de la hermandad, no exento de esa línea de
elegancia que nunca debe faltar en el exorno floral de un paso. Y esto no es
mérito de los floristas, sino, y es justo decirlo, de los priostes que desde
siempre han tenido las ideas muy claras sobre lo que querían para su hermandad. Si alguno de los que visitáis el blog tiene más interés en conocer el trabajo de esta familia, puede hacerlo en su blog www.floristeriaverdegal.blogspot.com
Y para terminar añadir algo relacionado con las “innovaciones
razonables”: Hace aproximadamente 10 años que empezamos a trabajar para esta
hermandad, y en aquellas fechas ya comenzamos a utilizar, en los cultos,
algunas variedades de flores que hasta ese momento eran poco frecuentes
(margarita Spheeder, Boris, freesias, alstroemerias y alguna mas). La salida
extraordinaria de la Virgen del Mayor Dolor aquel octubre de 2007?, tristemente
deslucida por la lluvia, contó con un novedoso exorno floral (que
posteriormente ha sido imitado por otros) que a pesar de la variedad de flores
y colores mantenía una línea de armonía y sutileza que dio un resultado muy
elegante.-
Sólo puede agradeceros vuestra amabilidad y
buen hacer, y desearos lo mejor en todos los aspectos de la vida.
Magnífica entrevista para conocer más la labor humilde y tan importante de la familia Vedia Martín con la Semana Santa de Granada desde hace décadas. y a propósito de la Hermandad Escolapia, es cierto que fue en aquel rosario vespertino, cuando pudo verse por primera vez en Granada un exorno floral en un paso en tonos malvas y morados, tan característico ya de la misma, y que ahora está tan de moda para más imágenes
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